"¡DIOS, PORQUE LO MATARON!"

Amigos de Marco Antonio conocían al asesino y dicen que consumía "drogas" pero que parecía un muchacho tranquilo.

Edith Tapia, amiga íntima del desaparecido Marco Antonio, conoció al presunto asesino Jorge Luis Glenni Ponce cuando el joven trabajaba como anfitrión en el spa del estilista ubicado en San Isidro.

La modelo no salía de su asombro al conocer que el veinteañero, que parecía tranquilo y con pinta de buena gente, se encuentre involucrado en el cruel asesinato de su amigo.

"¡Dios mío, qué le pasó a ese chico, por qué lo mató! Es tan joven. Cómo fue posible que cometiera esa salvajada. Se le veía tranquilo. Si recuerdo bien le decían 'Coco', era anfitrión y repartía gaseosas en el local", dijo sorprendida la cotizada modelo.

"Pero ese chico trabajó hace dos o tres años con Marco. Salieron una vez, pero de ahí no sé qué pasó y dejó de trabajar. No puedo decir si después de ese tiempo se volvió a ver con mi amigo porque no andaba todo el tiempo con él, pero si es el asesino que le caiga todo el peso de la ley, a él y a sus cómplices, porque seguramente no actuó solo", añadió.

Aunque Tapia no quiso confirmarlo, se supo que Gallego dejó de contar con los servicios de Glenni al conocer que el joven tenía problemas con las drogas, pero tiempo después volvieron a tener contacto ya que Coco buscó a Marco Antonio para pedirle trabajo. En adelante el joven y el estilista volvieron a frecuentarse, pero aún no se sabe si retomaron el amorío y cuáles fueron los motivos por los que lo mató.

La captura de Glenni sorprendió a los amigos del estilista, como Peter Ferrari y Claudia Portocarrero, a quienes les cuesta creer que gente del entorno de Marco esté involucrada en el crimen. "Yo la verdad no lo recuerdo, pero si es el asesino que se le castigue como se merece, que se pudra en la cárcel, él y todos los malditos que lo ayudaron", dijo Peter.

La Nañita por su parte señaló que las autoridades deben hacer su mejor trabajo y no dejar que este homicidio quede impune. "Justicia es lo que todos pedimos. Marco no mereció morir de esa manera tan vil y despiadada, quiero que esto ya termine para que su familia de alguna manera encuentre paz".

Más drástico fue Richard Dulanto, quien recomendó a las autoridades molerlo a golpes hasta que le saquen la verdad, "que lo maten, no me importa".

Fuente: Diario Ojo